No recuerdo nuestra conversación
Sólo el cálido silencio sobre nosotros
La magia envolviendonos
de la cual desprendernos
no quisimos ni pudimos
Tu mirada que sin realizar ningún esfuerzo
la supervivencia del Amor amparaba
hasta después de la muerte inclusive
Haciéndolo interactuar
entre el mundo terrenal y el divino
Nítida en sus menores detalles
la exótica y salvaje fragancia
de tu envoltura
Como vista desde el exterior
por una tercera persona
la imagen veraz de tu fantasía
que sin preguntas ni explicaciones
buscaba mis deseos escondidos
que habitaban en el zaguán de los olvidos
Pero, para qué preguntar y explicar
si todo estaba escrito
Como escrita está la escena
rápida y breve
de cuando Ra se asienta
sobre el matiz aturquesado del mar